23 abril, 2014

Ruta bici de montaña con GPS: Zaragoza, Vuelta a Los Montes Blancos, Zaragoza.


Partimos desde la margen derecha del río Gállego, en su encuentro con el Ebro. Aquí, tomamos una vía para ciclistas y caminantes que, tras atravesar un puentecillo de madera,  que nos deja en el barrio de Santa Isabel. Salimos de él, en dirección al de Montañana. Cruzamos el puente sobre la autopista y, en la rotonda, salida de la derecha. Seguimos unos pocos metros y, a la izquierda, tomamos el Camino de Ronda. Luego, el de Los Olmos, que entre innumerables cruces, nos deja en Villamayor de Gállego. En esta localidad cruzamos la carretera y accedemos al camino que sube a los pinares de Valdeatalaya. Comienza la larga e interesante ruta por los Montes Blancos-Alfindén. Proseguimos ganando altura sin gran esfuerzo por en medio de un pinar. Estos montes, que para pedalear pueden parecer de entidad menor, por no tener gran altitud, son exigentes: las cuestas se suceden una tras otra, sin tregua alguna. 

Con esta premisa, nos plantamos en los alrededores del parque Eólico de Alfajarín. Llaneamos un poco en esta pequeña meseta y, por el barranco de las casas, descendemos unos cuantos kilómetros. Algo de respiro, y a subir de nuevo. Pedaleamos cerca de la carretera que une Zaragoza con la localidad de Farlete. La pista marcha entre  verdes trigales. Los Monegros, 
exuberantes. En su época más fértil.


Descendemos hacia el monte de Osera. Rodamos por territorio más blanco aún. El sol va perdiendo fuerza y otorga una bella e incipiente atardecida. Animados con el bonito y dilatado paisaje; atacamos otra ración de subidas: una, otra, una, otra... Engullimos la generosa "sartenada" de repechos y ponemos rumbo a la localidad de Alfajarín. Avanzamos sin más ruido que el frenético bullir de las abejas y del grave, rápido y tenso zumbido de alguna perdiz al arrancar a volar. Desembocamos en la pista del barranco de la Virgen, que se encuentra bastante rota por las últimas lluvias. Continuamos bajando y aparecemos a pie de la ermita de Alfajarín, donde finaliza la pista.


El santuario lo dejamos arriba, a la derecha. Por debajo de la autopista pasamos al casco urbano, a la derecha, seguimos una rectilínea calle, que se prolonga hasta donde acaba la zona de viviendas y tomamos un camino de tierra en dirección a la localidad de la Puebla de Alfindén. De este municipio salimos por un puente sobre la autopista y accedemos al recién asfaltado camino de que une La Puebla con Villamayor. A donde regresamos de nuevo e iniciamos la vuelta a Zaragoza por el trayecto de la venida.

Entramos en la ciudad por el mismo lugar del comienzo de la ruta, dándola por finalizada en el Azud de Ebro. 

Ruta por Los Montes Blancos, cerros que deben su nombre al alto contenido de yeso de su tierra. En esta red de montes, su mayor altura es de de unos 330 metros, que se extiende sobre territorio Monegros, con valles de fondo y barrancos lineales, sus laderas presentan grandes manchas de matorrales de romero, que le dan algo de color, hoy especialmente sonoras por el zumbar de las laboriosas abejas. Esta espacio tiene apariencia de desierto que le otorga una singular belleza que no deja indiferente. En fin, algo más de noventa kilómetros de bici para disfrutar de este territorio.




Villamayor de Gállego


Un descansito


Los Montes Blancos, ubicados en plena depresión del Ebro, entre las poblaciones de Alfajarín y Osera


Vista de la Sierra de Alcubierre: Monte Oscuro con el radar encima


Los Montes Blancos, hoy algo más verdes


Los monegros cultivados...


y vestidos de verde


El característico paisaje de la depresión del Ebro


Desde el camino de Alfajarín a La Puebla

2 comentarios:

  1. Solo digo una cosa: que ganas me han entrado de pedalear por Los Montes Blancos. Igual lo tengo que hacer en dos partes, jajaja, pero iré. Saludos.

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    1. Gracias. La zona es ideal para recorrerla en bici. Un saludo.

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