Ruta
a la localidad de Perdiguera. En en este recorrido por el comienzo de
los Monegros zaragozanos se visitan tres iconos característicos de la
comarca: La Sabina, en este caso la de Villamayor, árbol que es todo un
símbolo en la zona, las balsas, agua que se retenía para para uso
puramente agrícola y ganadero, y los antiguos pozos donde conservaban el
hielo de los gélidos inviernos. Recorrido que permite comprobar una vez
más que Aragón es tierra de contrastes.
Comenzamos
la ruta en, una vez más, el barrio de Santa Isabel, en la Avenida de La Industria, junto a la gasolinera.
Cruzamos el puente sobre la autopista y, en la rotonda,
primera salida a la derecha. Avanzamos por el asfalto unos metros y a la
izquierda tomamos el camino de Ronda. Cuando aparece su señalización, giramos a la derecha y tomamos el de Torre de Los Olmos. Por entre casas agrícolas, torres y alternando pistas, nos plantamos en Villamayor. Cruzamos el pueblo, pasamos por debajo de la ermita y atravesamos la carretera. Giramos a la izquierda y tomamos la Vereda de Villamayor. A unos cuatro kilómetros de iniciarla, avistamos la sabina milenaria de Villamayor y nos salimos un poco del camino para visitarla.
Emprendemos la marcha de nuevo por la pista que hemos abandonado y pedaleamos, dando cuenta de pequeñas cuestas que se suceden una tras otra. Nos aproximamos al barranco del Salado, el singular paisaje Monegros comienza a mostrarse. Proseguimos hasta que la pista lo cruza, punto que hoy contaba con algo de agua y bastante lodo. Decidimos seguir por otra pista que continua hacia arriba y que lo atraviesa por la parte más alta, donde no hay que mancharse ni aventurarse a mojarse los pies.
Marchamos en dirección a la localidad de Perdiguera hasta llegar a la carretera local que la une con Farlete. Girando a la derecha, nos introducimos en ella durante unos doscientos metros y, a la izquierda, volvemos a tomar tierra. Lo hacemos por el camino viejo de Zaragoza a Perdiguera. La pista ahora marcha en horizontal por en medio de enormes campos de cultivo. El panorama se abre y desaparecen los blanquecinos y pelados cerros durante este trayecto. Llegamos a lo población monegrina y cruzamos la carretera. Giramos a la derecha para poner rumbo y visitar el restaurado Pozo del Hielo, que data del siglo XVI, depósito de hielo cuando se congelaba el agua de la balsa de la Pez, sita junto a él. Tras la parada de rigor, iniciamos el regreso, pasando por la balsa.
Para volver, tomamos el camino de Agua Salada y comenzamos un suave descenso. Continuamos por la Val de Carbonera. Tras salir de ella, comenzamos a subir y hacemos un corto desvío de unos doscientos metros para acercarnos al punto del vértice geodésico de Loma Lobera. Volvemos de nuevo por lo pedaleado, para retomar la pista principal y ahora, en descenso más acusado, desembocamos en el camino de La Carbonera. Llegamos a Villamayor y bordeamos el pueblo para enlazar con los caminos de la venida, que nos devolverán a la rotonda y al barrio de Santa Isabel, lugar de comienzo y final del recorrido.
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La milenaria Sabina de Villamayor |
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...el viejo árbol todo un símbolo para los villamayorenses |
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El barranco del Salado en su parte más abrupta |
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Luego, el cultivo agradeciendo la poca lluvia que le cae |
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Pozo del hielo, próximo a la localidad de Perdiguera |
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El restaurado Pozo del Hielo (siglo XVI) |
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El antiguo pozo del hielo protegido y cubierto |
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La balsa de donde se surtía el pozo del hielo en los duros inviernos. De fondo el pozo y la sierra de Perdiguera |
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Bonita ruta para conocer los Monegros más próximos. Lo pintas muy bien. Con esta me atrevo.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias. Mejor hacerla por la mañana y en compañía. Cualquier percance mecánico te puede hacer llegar de noche a casa. En esta época del año todavía son cortas las tardes.
EliminarUn saludo.