Ruta a Perdiguera, municipio de los Monegros zaragozanos, territorio
semidesértico único en Europa, de aridez y climas extremos, hoy
pintados de verdes gracias al incipiente crecimiento de los cultivos. Elegimos ir a Perdiguera por la Vía verde del Camino de la Alfranca para disfrutar del
trayecto que discurre próximo al río Ebro, todo un lujo para los
sentidos pedalear en invierno próximos al Soto de Cantalobos, la vegetación ribereña, zonas de humedales,
sotos y galachos, se extienden casi doce kilómetros, practicamente hasta llegar la localidad de Pastriz. En fin, itinerario ideal para percibir el contacto
con la naturaleza y para contrastar la enorme diferencia que hay entre
la vega del Ebro y la zona de los Monegros.
Un vez más, el inicio y final de la circular ruta de hoy ha sido en el Paseo Echegaray, junto al Azud. Continuamos por debajo del puente sobre el río Ebro de la Ronda Hispanidad, para tomar el camino de la Alfranca. A la izquierda, dejamos el Soto de Cantalobos; uno de los espacios naturales más importantes en las inmediaciones de Zaragoza, una joya natural a un paso de la capital zaragozana. Continuamos por pista principal, a la altura del barrio rural de La Cartuja, cruzamos el río por la pasarela peatonal del Bicentenario
Pedaleando vamos disfrutando de la reserva natural de los galachos de Pastriz y del bosque de ribera que va apareciendo a ambos lados del camino. Cruzamos la localidad de Pastriz y en unos cuatro kilómetros nos plantamos en La Puebla de Alfindén. Atravesamos esta población por un puente que hay sobre la autopista, nada más cruzar aparece una rotonda. Desde aquí, acedemos al camino de Villamayor. Rodamos por esta pista asfaltada unos tres kilómetros y nos desviamos a la derecha, volvemos a pisar tierra de nuevo.
Los caminos van ganando altura de forma suave. Avanzamos y el panorama se ensancha, los árboles desaparecen y continuamos dando pedales en compañía de las blanquecinas lomas, muchas de ellas, oscurecidas por monte bajo y matas de tomillo. Transitamos en dirección a las zonas con más altitud del recorrido.
Marchamos por los caminos que discurre por las inmediaciones de los cerros de Sima Flora, Corral de la Pica, Campoliva y el Parque Eólico de Alfjarín. Coronada la parte de los aerogeneradores, bajamos hacia la balsa de Candasnos, para desde aquí, tomar la pista de Alfajarín a Perdiguera. En la localidad monegrina, techo de la ruta, es obligada la parada para repostar agua, tras el acopio e hidratación, iniciamos la vuelta a Zaragoza.
Abandonamos Perdiguera por el camino Viejo de Zaragoza. Al llegar a la carretera de Farlete nos introducimos en ella girando a la derecha. Pedaleamos unos 300 metros y cruzamos a la izquierda. Tomamos un camino, que comienza con una curva a la derecha y un repecho. Ahora, iniciamos un descenso hasta llegar a la pista del Barranco Salado, que nos llevará a Villamayor. Desde aquí, por entre huertas, casas agrícolas y un zigzagueante camino llegamos a la rotonda que une el barrio del Santa Isabel con el de Montañana. Solo queda, una vez en Santa Isabel, retomar la vía-andador que discurre paralela al Gállego, en dirección a la desembocadura, antes hay que cruzar una pasarela de madera.
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