Ruta la la Balsa de Larralde. Un humedal de cuatro hectáreas y gran importancia natural. Al visitarlo, el interior te transmite toda la armonía
y serenidad que suele reinar en los humedales. Es importante respetar
el silencio y otras normas en el área.
Interesante recorrido por este bonito paraje, envuelto por un enorme
carrizal, y sin más ruido que el de las aves acuáticas que habitan este pequeño ecosistema. El recorrido no presenta dificultad, totalmente llano, apto para todos los
niveles "ciclistas". Con viento en contra, esta distancia puede
resultar algo dificultosa si no se está acostumbrado a estas
distancias.
Comenzamos en el barrio zaragozano de Casablanca, en el parque que hay a la altura de las esclusas del canal y de la popular fuente de los incrédulos (1786). Accedemos a la pista que marcha en paralelo al Canal Imperial, por la orilla del lado de este barrio. Todo el trayecto discurre por este camino, pedaleando de forma cómoda y disfrutanto del lineal parque que conforman las orillas de canal llegamos a la almenara de San Miguel. Proseguimos y, sin apernas darnos cuenta, estamos en el kilómetro 20 donde encontramos el Puente de Clavería. Aquí tomamos a la derecha una pista asfaltada que sale del puente. Recorremos un kilómetro, aproximadamente, y aparece la barriada de Torre Medina y la señal para desviarnos a la balsa, que se encuentra contigua a unas torres de campo.
Ponemos pie a tierra y nos adentramos en la senda y pasarela que nos lleva hasta el mirador de fauna del humedal. Esta laguna se forma como consecuencia de la extración de arcilla para su utilización en el revestimiento del canal. Era una escombrera y charca muy deteriorada, pero en 1995 la Confederación Hidrográfica del Ebro y la Asociación Naturalista de Aragón se pusieron manos a la obra para recuperarla.
Hoy es un humedal de cuatro hectáreas y gran importancia natural. Al visitarlo, el interior te transmite toda la armonía y serenidad que suele reinar en los humedales. Es importante respetar el silencio y otras normas en el área. El observatorio de fauna se encuentra cerrado, pero se puede pedir la llave en el bar de la zona. Tras el disfrute de este bonito paraje, envueltos por un enorme carrizal, y sin más ruido que el de las aves acuáticas que habitan este pequeño ecosistema, iniciamos la vuelta. La realizamos por el camino de venida.
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| Comenzamos en el barrio de Casablanca, que debe su nombre al color de la casa de las esclusas |
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| Fuente de los Incrédulos, construida en 1786, ubicada junto a las esclusas del Canal |
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| El canal y la ancha pista que transita en paralelo |
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| La barriada de Torre Medina y la señal que nos indica nuestro destino |
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| Cartel en la entrada con el catálogo de aves que viven y visitan el humedal y otras particularidades |
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| La Balsa de Larralde |
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| Todo un lujo para las aves de la zona |
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| La pasarela que lleva al observatorio |
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| El refugio mirador de fauna |
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| Laguna viva |
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| Balsa de Larralde |
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| La senda que bordea en parte la balsa |
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| Al fondo el observatorio |
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Me encantan los humedales y las aves, bonitas fotos de la balsa. Con esta ruta me atrevo. Tendré que llevar comida, tardaré el doble o el triple que tú. jajaja.
ResponderEliminarNo es mala idea la de llevar bocadillo. Seguro que no te costará tanto hacer la ruta y visita a la balsa.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias por poner las rutas y enseñarnos estos sitios ;-)
ResponderEliminarDavid. C G
De nada. A disfrutar de la bici y de las rutas!
EliminarSaludos.
No tenía idea de donde estaba esta balsa, tiene buena pinta la ruta y el sitio. Tomo nota, espero llegar... jejeje
ResponderEliminarUn recorrido tranquilo y sin desnivel. La visita al pequeño humedal es entretenida, te gustará.
EliminarSaludos