Nos presentamos en las inmediaciones del Parque Grande, con muchas dudas: los dos últimos días de tormenta en Zaragoza hacían prever barro. A veces, sin embargo, las previsiones fallan y, en esta ocasión, de forma agradable, solamente hubo que sortear algún charco-lodazal. Los caminos estaban con el piso perfecto.
Iniciamos la ruta en las inmediaciones del Parque. Luego, nos dirigimos al Camino de la Fuente de La Junquera, para acceder al conocido camino asfaltado que nos pone en dirección a las localidades de Cuarte y Cadrete, después de esta última tomamos tierra. Proseguimos hacia María de Huerva. Cruzamos el río Huerva, giro a la izquierda y continuamos por la pista principal. Al llegar a la parte de arriba, giro a la izquierda. Nada más pasar una granja avícola, giro a la derecha. Pedaleamos paralelos a las vías del tren en dirección a Botorrita. Llegamos a la carretera de Jaulín, damos pedales por ella algo menos de un kilómetro y entramos en Botorrita. Terminada la zona de viviendas ponemos rumbo a la plana de Jaulín. Lo hacemos por una terrosa pista de color arcilla, que comienza en suave ascensión, luego vienen mayores desniveles, justo antes de subir a la meseta, llega el tramo más esforzado de toda la ruta.
Arriba el panorama se abre y ofrece unas amplísimas vistas del valle del río Huerva. Cruzamos la meseta y bajamos por el camino de Mezalocha a Jaulín, pista que transita en rápido descenso y con pronunciadas curvas. Finalizamos la vertiginosa bajada en un cruce de caminos. Aquí, tomamos el señalizado y corto tramo que nos sube al pantano de Mezalocha. Tras las fotos de rigor, volvemos a bajar a la encrucijada y comenzamos la vuelta a Zaragoza. Por el Camino de la Heredad ponemos rumbo a Muel.
Parada en esta última localidad a repostar agua en el parque. Reconfortados y revitalizados con la imprescindible hidratación partimos hacia la localidad de Mozota, donde hacemos otro receso para fotografiar el fortificado Palacio de los Duques de Villahermosa, levantado en el siglo XV sobre el antiguo Castillo. Dejamos el tranquilo pueblo y pasamos al otro lado del río Huerva para acceder al camino de la Acequia Alta. Rodamos paralelos a las vías del tren hasta llegar de nuevo a la granja. Aquí, tomamos el itinerario de la venida.
Ruta que no por conocida deja de ser siempre interesante: subir y disfrutar de las vistas que presenta la meseta de Jaulín del valle de río Huerva, situada a setecientos metros del altitud, atravesar el parque de Muel, extraordinario espacio natural, situado a los pies del dique de la presa romana y visitar pantano de Mezalocha, un embalse rodeado de una escarpada depresión rocosa, hacen de este recorrido una entretenida ruta en bicicleta de montaña de unos 73 kilómetros, comenzando en el zaragozano Parque Grande.
No hay comentarios:
Publicar un comentario